Desde que Javier Milei asumió la presidencia en Argentina el 10 de diciembre del 2023, despreció en varias oportunidades, a algunos países y organismos a nivel mundial. Renunció al ingreso a los BRICS y a su vez, relegó la relación con la República Popular de China por ser “de izquierda” o “comunista”, además de deslizar que no había libertad de expresión ni democracia en el territorio chino.
Durante estos meses, el gobierno argentino demuestra que prioriza lo ideológico sobre lo político estratégico mientras que para los chinos la relación entre países no se juega en el ámbito público, sobre todo teniendo en cuenta que tal como dice el libro blanco de China sobre América Latina y el Caribe, priorizan el interés y el beneficio.
Este trabajo buscará evidenciar y analizar los discursos de ambos países teniendo en cuenta la lógica que intenta instalar el gobierno de Argentina de Occidente/bueno y Oriente/malo y cómo esto influye actualmente en la relación sinoargentina.