El Estado Colombiano reestructuró sus organismos de aplicación de cooperación internacional a partir de la Declaración de los Objetivos del Milenio en el año 2000, para dar solución a la problemática de los migrantes forzados. Colombia reconoce que carece de los recursos financieros y logísticos para cumplir con ellos, para lo cual usa la cooperación internacional, a través de Acción Social, como parte del cumplimiento del objetivo octavo de los ODM.