Para la sociedad del Antiguo Egipto el mito era la forma de legitimación y la explicación de porqué el mundo adquiría determinada forma y orden. El paso de una economía cazadora-recolectora a una propiamente agrícola provoca un cambio de mentalidad en donde la figura del rey aparece como garante del orden dado. En este trabajo analizaremos la construcción de la identidad del rey en el Antiguo Egipto en base a dos interrogantes: los orígenes topográficos del culto a Osiris y cómo a través del mito se produce la identificación de Osiris el rey-padre muerto con su sucesor Horus-rey-hijo-vivo, todo esto vinculado a la formación del Estado.