Además de los juegos para PCs de escritorio y consolas, hay numerosos juegos desarrollados para dispositivos móviles, tales como los celulares y las PALMs. Sin embargo, sólo unos pocos pueden sentir el ambiente físico. La mayoría de los juegos están atados al escritorio o a los dispositivos en los que el juego se ejecuta y son raros los que salen de allí, sin siquiera pensar en una experiencia que extienda considerablemente el área de juego.
Esto plantea el desafío de nuevas tecnologías o la reingeniería de las existentes, tanto en el área de software como de hardware, para lograr que el ambiente real del juego se extienda más allá de del dispositivo en el que éste se ejecuta. En lo que respecta al hardware, se deben diseñar o adaptar los dispositivos adecuados para interactuar con el medio; en lo que respecta al software el desafío es inmenso ya que, en el contexto de las aplicaciones, las interfaces deben desaparecer, integrándose al medio.
En este contexto, la interactividad con el medio es realmente un desafío considerable ya que deben construirse sistemas y aplicaciones cuyas interfaces desaparezcan; los usuarios deben interactuar natural e intuitivamente con el ambiente.
Esta propuesta de sacar un juego del escritorio, puede influenciar o incorporarse parcialmente a los contenidos de materias tales como Computación Gráfica, Interacción Humano-Computadora e Interfaces Gráficas; también podría integrarse a otras asignaturas y puede ser una opción válida a considerar para la realización de proyecto final de carrera ya que reúne las características de ser integrador y de constituir un trabajo genuino de investigación, en el que se conjugan tecnologías de hardware y software.
Este artículo describe las tareas desarrolladas hasta el momento y los desafíos que se presentaron en las distintas asignaturas concernientes a sumar a este objetivo.