A medida que las organizaciones crecen, existe una creciente necesidad de convertir el conocimiento personal en conocimiento organizacional. Por lo tanto, es posible vincular al Aprendizaje Organizacional y la Gestión del Conocimiento, considerando a ésta última como un proceso de gestión organizacional cuyo objetivo es identificar el conocimiento que producen los trabajadores individualmente para convertirlo en información que pueda ser reutilizada por el resto de los empleados de la organización; rescatando la importancia de “saber qué es lo que sabe” y de hacer el mejor uso de este conocimiento.
Por su parte, los conocimientos y experiencias que los miembros de los equipos de proyecto crean y adquieren durante el desarrollo del software constituyen un valioso activo para las organizaciones que buscan mejorar sus prácticas y procesos software.
Los enfoques existentes para capturar y gestionar esos conocimientos y experiencias se basan esencialmente en la creación y mantenimiento de repositorios de experiencias pero no determinan la manera ni el momento en que los diferentes procesos de Gestión del Conocimiento deben llevarse a cabo.
En esta investigación aplicada se propone un modelo y una herramienta para gestionar el conocimiento y la experiencia, integradas a las actividades de desarrollo de los proyectos software.