Dentro de las principales características de la educación a distancia se pueden mencionar [Churchill, 2004]: (a) está mediada por tecnología informática, (b) la comunicación no es en tiempo real y (c) cuenta con un conjunto de apoyos disponibles en línea.
En la educación a distancia la interacción alumno-profesor, en general, se hace por intermedio de recursos tecnológicos [Quesada, 2006], donde la posibilidad de comunicarse con lenguaje gestual, corporal y oral, está dificultada.
Actualmente los cursos de educación dados a distancia se apoyan, en su mayoría, en Entornos Virtuales de Enseñanza y Aprendizaje (EVEAs). Estas plataformas contienen datos de los participantes, además de herramientas que dan soporte a la comunicación entre alumnos (foros, mensajes, chats, repositorios de materiales de lectura, entre otros), las cuales generan gran cantidad de información [Charum, 2007].
El EVEA registra todas las instancias de comunicación interpersonales. Tales registros podrían utilizarse como base para modelar el comportamiento de los alumnos de educación a distancia.