La evolución de las tecnologías de comunicación e información ha permitido que las bases de datos tengan la capacidad de almacenar nuevos tipos de datos tales como imágenes, sonido, video, etc.
Es sumamente dificultoso, y en algunos casos imposible, estructurar estos tipos de datos en registros para que se adecuen al concepto tradicional de búsqueda exacta (esto es recuperar aquellos registros cuyos campos coincidan con los aportados en la búsqueda). Aún cuando pudiera hacerse, las consultas a la base generalmente serán por objetos similares a uno dado y no por aquellos exactamente iguales.
Estos tipos de búsquedas se conocen con el nombre de búsquedas aproximadas o búsquedas por similitud, y aparecen en áreas tales como reconocimiento de voz, reconocimiento de imágenes, recuperación de texto, detección de copias, compresión de videos, bases de datos médicas, etc.