Aunque en los últimos años se ha avanzado considerablemente en la investigación realizada con personas con síndrome de Down, todavía quedan bastantes interrogantes por resolver. Los estudios que han analizado el funcionamiento cognitivo de los niños con síndrome de Down, en tanto que grupo específico y diferenciado, han aportado datos que revelan problemas y déficits en algunos procesos, funciones y estrategias cognitivas en estos niños.
También se observan dificultades específicas en determinadas áreas de aprendizaje. Estas peculiaridades cognitivas y de aprendizaje nos permiten afirmar que los niños con síndrome de Down no muestran sólo un retraso en el desarrollo sino que manifiestan un perfil de aprendizaje específico con puntos fuertes y débiles. Ahora bien, este conocimiento va a resultar importante para habilitar programas educativos que permitan un mayor desarrollo de sus capacidades y conocimientos.