Las dificultades que comporta para los alumnos y sus familias acceder al sistema educativo universitario, por los gastos que este hecho supone, se intenta paliar mediante un sistema de becas y ayudas que asuma una parte de estos gastos. En este sentido, un sistema de becas y ayudas para estudiantes universitarios se tiene que considerar como un aspecto básico y prioritario en la calidad de la enseñanza superior. En España las becas son competencia exclusiva de la Estado, teniendo la finalidad básica de incrementar las posibilidades de acceso a la educación superior del mayor número posible de estudiantes, reduciendo o limitando los obstáculos de carácter económico derivados de los gastos de la educación. Por su parte, las comunidades autónomas, en mayor o menor grado, han ido desarrollando, dentro sus limitaciones presupuestarias y a la espera de las transferencias en esta materia, políticas paralelas de ayudas complementarias.