Al momento de conocerla presentaba metástasis pulmonares de un tumor de endometrio, diarrea, signos de trombosis venosa con intenso edema en pierna derecha y lumbalgia con sospecha de metástasis pelviana.
En 2006 había realizado tratamiento de quimioterapia y radioterapia y según su oncólogo no tenía más posibilidades de tratamiento curativo por falta de sensibilidad celular, ante esta situación el médico le indica a sus hijas la interconsulta con el servicio de Cuidados Paliativos.