El artículo de Hidalgo diagnostica una gran transformación en la producción antropológica de los últimos cincuenta años -equivalente, según sus palabras, a un cambio de paradigma en el sentido khuniano-, desarrollando una argumentación en dos planos: la producción reciente que está interesada en realizar una etnografía del mundo de la ciencia y de la tecnología, y el trabajo de algunos autores ligados a la disciplina en la Argentina. En lugar de estructurar mi comentario manifestando acuerdos o restricciones relativos a uno u otro aspecto del texto, me parece más interesante dar algunos elementos que permitan discutir su supuesto básico, la idea de que el interés por el mundo contemporáneo, o por el presente, pueda ser entendido como el elemento articulador de los desarrollos en teoría antropológica que la autora comenta.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)