Aprovechando el hecho de integrar la Comisión Área Ciencia y Tecnología (Sector Agrario) para el Proyecto Nacional de Desarrollo, preparé un extenso informe que en su segunda parte propone, con carácter prioritario y urgente, el desarrollo de centros regionales de investigación al grado de excelencia, a partir (en su primera etapa) de centros va existentes que merezcan confiabilidad. Sostenía la siguiente premisa:
“Lograr el desarrollo regional adecuado, en ciencia y técnica, estimulando el crecimiento de las instituciones existentes, ampliando sus actuales dotaciones y propias capacidades es una forma de acelerar el progreso en función de las prioridades sectoriales nacionales y de establecer una estructura interdisciplinaria con vocación regional, que sea centro de cultura, capacitado para encarar los problemas propios del desarrollo de cada región del país, base indispensable para que se
pueda cumplir la deseable integración nacional.”