Para poder interpretar en toda su complejidad el parasitismo animal, deben tenerse presente, a lo largo de la presente exposición de ideas tres conceptos fundamentales.
El primer concepto es que los parásitos evolucionaron a partir de formas de vida libre.
El segundo que las formas de vida libre están expuestas a la influencia del medio externo, como agentes climáticos, el frío y el calor, la desecación, los vientos, heladas, etc.
El tercero es que los parásitos encuentran en los huéspedes condiciones muy propicias de temperatura, humedad, alimentación y protección que les son muy favorables para vivir, crecer y reproducirse, perpetuando su especie y evitando las condiciones adversas del medio externo.