El artículo propone poner en tensión la modernidad en la Argentina de los años 50, el concepto de suburbio y los comienzos de la televisión en el país. Con ese objetivo trata la construcción de la paradigmática Villa América, un suburbio modelo, y su articulación con la llegada de la televisión en 1951. Villa América nació como un conjunto habitacional inspirado en los barrios ingleses, una expresión de confort, de avances técnicos y urbanismo realizada por el gobierno de Perón. El juego de fuerzas que la originaron dispone aquí un abordaje al singular proceso de modernización peronista. En ese mismo marco histórico el gobierno inaugura un sistema que establecía una nueva forma de relación con el mundo: la televisión. Para Raymond Williams el suburbio y los bienes durables, entre los que se encuentra la televisión, configuraron una autosuficiencia del espacio doméstico y modificaron la relación entre lo presencial y lo no presencial. Pero en la Argentina la llegada de la TV tuvo un desarrollo signado por una lógica particular, ligada al mismo proceso de modernización que creo Villa América. Así, Villa América y TV se encuentran. No para articular de manera directa el vínculo que los estudios culturales atribuyen a suburbio y mediación, sino para repensar aspectos del habitar, comunicar y consumir de la Argentina de mediados del siglo XX.