Los implantes dentales osteointegrados representan una modalidad de tratamiento aceptable para pacientes desdentados total o parcialmente.
El principio que propone Bränemark desde el nacimiento de la implantología es poder montar y desmontar las estructuras protéticas sobre los implantes colocados en los maxilares, gracias al ajuste y/o aflojamiento del tornillo de fijación.
A pesar del éxito reconocido, fallas mecánicas asociadas a restauraciones de un solo implante representan un desafío para los odontólogos. Entre los tipos de fallas mecánicas, el aflojamiento del tornillo del pilar sigue siendo la más frecuentemente reportada en la literatura.