Son vastos los recursos retóricos a través de los cuales la persona que narra su propia experiencia establece un corrimiento discursivo que la escinde o distancia de la situación narrada. También son innumerables las intenciones comunicativas por las cuales esos corrimientos se producen.
En los diálogos cotidianos, en declaraciones mediáticas y en entrevistas, el narrador/a propone así que esa –su específica y particular experiencia- es importante, no tanto por ser suya, sino por las condiciones intrínsecas del relato y su posibilidad de universalización.