No hay lugar a dudas sobre el impacto que genera la aplicación o ausencia del concepto de usabilidad en el desarrollo de sitios web. Son muchos los casos documentados que justifican que los desarrolladores, diseñadores, testers, y sponsors tomen en serio el tema con el fin alcanzar en el menor tiempo los objetivos de sus sitios web. Mejorar el diseño de página, y las rutas de navegación, por ejemplo, puede significar un incremento en la frecuencia de uso del sitio al ahorrarle tiempo al usuario en la ubicación de lo que éste
requiere, mejorar la facilidad de aprendizaje, puede representar un ahorro en el rubro de capacitación y llamadas al equipo de soporte, o call center. Además, más allá de las razones económicas, la usabilidad logra que la información mejore la calidad de vida de las personas haciendo de ésta un bien que pueda ser entendido por todas las personas sin discriminación del nivel cultural, o intelectual. Por ello, varios gobiernos han visto con buenos ojos establecer directrices de usabilidad que aunque no constituyen una garantía de sitios web gubernamentales fáciles de usar, por sí mismo, sí podrían servir de guía a los arquitectos de información, desarrolladores, testers y expertos en usabilidad para hacer de la Arquitectura de Información, diseño de interfaz de usuario, diseño de interacción, búsqueda, pruebas de usabilidad, y contenido temas más centrados en el usuario.
Son muchos los factores de calidad de sitios web, sin embargo por ser un campo tan amplio, esta investigación se centró en la usabilidad, en sus atributos, metodologías de evaluación de la usabilidad, herramientas, y casos de aplicación práctica de pruebas de usabilidad. De manera general existen tres tipos de clasificación de metodologías para probar la usabilidad: Por expertos, por usuarios y automatizadas. Cada una tiene su importancia y aporta de manera diferente a la mejora de cada uno de los atributos de usabilidad, y no deberían considerarse excluyentes una de otra, sino complementarias. Sin embargo, en la búsqueda realizada
sobre herramientas en el mercado, se nota un incremento mayor de las herramientas existentes en el mercado que facilitan y abaratan las pruebas de usuarios, explotando las redes sociales y las herramientas de multimedia.
Sin embargo, para los desarrolladores aun no es común que se tome en cuenta la usabilidad como elemento indispensables del proceso de desarrollo de software; por lo menos en el entorno Colombiano. Para mejorar esta situación ayudaría que se incorpore la evaluación y pruebas de usabilidad dentro de un desarrollo de software, como lo ha propuesto una Universidad Colombiana, y se mejore la formación de desarrolladores y diseñadores en el tema, además de asignar al auditor de Sistemas como actor para coordinar las pruebas y se cuente con un mayor número de herramientas de evaluación de usabilidad de proveedores locales, centradas en realizar pruebas a la medida, dado el entorno, y las directrices que se adopte para cada sitio web.