La intención de este artículo es aportar a la reflexión de una problemática que transcurre actualmente en la institución escolar, su distanciamiento de la cotidianeidad de los niños y jóvenes.
Estos sujetos son portadores de otros saberes que rebasan la tradicional cultura escolar y se forman también a partir del contacto con los medios de comunicación como la televisión y la computadora.
De allí, urge la necesidad que se reconozcan las características de las nuevas subjetividades que se han constituido en la sociedad a partir de los últimos veinte años.
Asimismo, se propone sistematizar las diferentes posturas que desde la escuela se han mantenido en vinculación con los medios: ignorándolos, retomándolos acríticamente o promoviendo una educación en medios. Esta última línea superadora postula el rol estratégico que deben asumir los docentes para promover en sus alumnos capacidades que les permitan ejercer un consumo crítico de medios, pero también el lograr desarrollarse en tanto productores de medios, generando productos comunicacionales en los que puedan hacer circular su voz.