El objetivo del estudio es analizar el origen y la calidad del agua domiciliaria utilizada para el consumo, en una muestra de hogares del área de la Cuenca Matanza-Riachuelo del Gran Buenos Aires, Argentina. Según su origen, el 9% de las muestras de agua provenientes de la red pública, el 45% de las de agua envasada y el 80% de las provenientes de perforaciones o pozos resultaron no potables por exceso de coliformes, Escherichia colli o nitratos. Los individuos de las muestras de hogares en los que la fuente principal para el consumo eran pozos individuales presentaron una probabilidad 55% superior de padecer alguna enfermedad de origen hídrico, probabilidad que llegaría al 87% en el caso de las diarreas y al 160% en el de las dermatitis. El agua para consumo humano en este territorio debería provenir de fuentes centralizadas que aseguren el control de la calidad del agua.