Muchas veces nos pueden resultar extraños los comentarios que definen a un sujeto en relación con el automóvil que maneja, la ropa o los zaptos que lleva puestos, la profesión que ejerce, etc. Sin embargo, cuando interactuamos con el otro, percibios la imagen personal proyectada y leemos, rápidamente, un perfil. La selección de la indumentaria, la prolijidad, la coherencia, la estética y el estilo son un rasgo primario de proyección simbólica que, en el juego de roles sociales, uno es capaz de decodificar consciente o inconscientemente. Toda la carga simbólica denotada en las marcas forma parte de la fachada que el sujeto utiliza para manifestarse, como enuncia Erving Goffman en sus trabajos. Es el tema: las marcas como externos constituyentes de la identidad del sujeto.