Este libro muestra la articulación de las aristocracias dentro del espacio controlado por la monarquía hispánica en el período que va desde 1492 hasta 1713.
La elección del período no es casual. El momento en que España comienza su expansión atlántica, la unión de las coronas de Castilla y Aragón que dio lugar a una política de alianzas matrimoniales, cuya mayor expresión fue la unión de la dinastía castellana con la dinastía Habsburgo, que impulsó la Corona española, y provocó la formación de un Imperio. Esta etapa tiene una especificidad que reside entre otras cosas, en el modo de entender la política y el ejercicio del poder.