Históricamente, las relaciones entre Argentina y Brasil fueron competitivas y hasta en algunos casos conflictivas. Esto fue consecuencia de una serie de factores, entre los que se encuentran: las coyunturas propias de cada una de los países, los modelos de desarrollo económico seguidos, la percepción del mundo que cada uno de los estados tuvo, el lugar que se le otorgó a Estados Unidos en el diseño de la agenda externa como así también la construcción de alianzas y la imagen que se tenía del país vecino.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)