En el artículo se analiza los cambios y ajustes de la política exterior de Argentina durante la presidencia de Eduardo Duhalde en el marco de las relaciones con Estados Unidos y con el MERCOSUR. En el ámbito internacional, el gobierno tuvo dos objetivos fundamentales: 1) incrementar el acceso de la producción argentina en el mercado internacional mediante la negociación en escenarios múltiples y de manera simultánea, y 2) conseguir apoyo para reinsertar a la Argentina en el mundo luego del aislamiento que provocó la eufórica declaración del default en diciembre de 2001. Para ello, las acciones estuvieron dirigidas a consolidar los vínculos con los países del MERCOSUR, especialmente con Brasil. El fortalecimiento de la alianza política con Brasil se consideró fundamental para apuntalar la legitimidad del gobierno y para emprender la negociación con los organismos financieros multilaterales. En este contexto, se identifican las causas de la adopción de esta estrategia, sus fundamentos, los fines y objetivos manifiestos, y los conflictos y avances en las agendas bilaterales.