En 1988, a iniciativa del presidente brasileño Itamar Franco, y en vísperas de la Segunda Reunión Cumbre de las Américas realizada en Santiago de Chile, se firma en Buenos Aires el Acuerdo Marco para la creación de una Zona de Libre Comercio entre el MERCOSUR y la Comunidad Andina a partir del año 2000, y se opta por la coordinación de posiciones en el proceso de integración hemisférico. Este acontecimiento político puede considerarse una etapa inicial de la creación de una zona de libre comercio en toda Sudamérica. Dicho proceso queda plasmado en la Cumbre de Brasilia, que convoca el entonces presidente Fernando Enrique Cardozo a todos los jefes de Estado sudamericanos, que reafirmaron su intención de unir el MERCOSUR y la CAN mediante un acuerdo de libre comercio en el cual, incluyendo Chile, Guyana y Surinam; siendo en noviembre de 2004, con ocasión de la III Reunión de Presidentes de América del Sur en Cuzco, Perú, cuando se suscribió el documento que dio comienzo al proceso de construcción de la Comunidad Sudamericana de Naciones.
Ahora bien, cabe preguntarse si realmente la naciente Comunidad Sudamericana de Naciones obedece a un verdadero proyecto de integración subregional o bien a una política guiada por una visión del interés nacional brasileño.
El objetivo del presente trabajo es analizar las tendencias y compromisos de Brasil en el contexto sudamericano.