En los últimos años, el debate en torno a la consolidación de la democracia en América del Sur, pasó a ser asociado directamente a la ampliación de los procesos de integración regional. De cierta forma, la cooperación establecida entre los países representaba un compromiso mayor con el mantenimiento de las instituciones, con el cumplimiento de las reglas internacionales, además de significar una alternativa de los países menos desarrollados de buscar una forma de relacionarse mejor con el resto del mundo.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)