Dentro de un contexto que señala a la globalización como la manifestación concreta de una etapa de alto dinamismo, cambio tecnológico y reasignación de recursos a escala planetaria -en el cual la presencia del estado no ha perdido sentido-, la masificación de la enseñanza y la intensificación de las comunicaciones son las tendencias promotoras de la mayor demanda de expertos para el mercado de trabajo, de la brecha entre conocimiento de frontera y conocimiento codificado. Se produce formas de desarrollar la investigación que articulan el perfil tradicional a nuevas pautas: extender las relaciones de trabajo a otros espacios, no académicos; extender los objetivos más allá del interés disciplinar, produciéndose cruces de prácticas, disciplinas e intereses a partir de un mismo foco de atención. Pareciera que la expansión paralela de productores de conocimiento por el lado de la oferta, y de la exigencia de conocimiento especializado por el lado de la demanda (empresas), crea las condiciones para la difuminación de un nuevo modo de producción de conocimiento. Se analiza en caso de una universidad argentina.