La presente ponencia a presentar ante este Congreso apunta a elaborar un somero análisis sobre las consecuencias que el fenómeno conocido como "globalización" apareja para las economías de los países periféricos, denominados también "emergentes", apelativo que en poco o nada ha elevado su alicaído status.
Digo aquí que las consecuencias producidas han recaído sobre las economías de estos estados porque si bien algunas han repercutido en el ámbito cultural y social, ha sido en la economía donde más se han notado sus efectos.
Los notables progresos obtenidos en las comunicaciones acrecentaron la ya elevada movilidad de los elevados "stocks" de capitales especulativos ansiosos de obtener rendimientos reales altamente positivos, contribuyendo a restarle todo estímulo para convertirse en genuinas inversiones de capitales de riesgo. El "prestamista" no fue reemplazado por el "inversor". Los capitales otorgados en préstamo no contribuyeron al desarrollo de los "emergentes", sino que representaron una pesada carga de servicios de la deuda que coadyuvaron pesadamente a mantener su estado de subdesarrollo.
La antinomia monetarismo - estructuralismo de la década de los 80 no ha perdido vigencia, como no la han perdido los viejos conceptos vertidos por la CEPAL, y a los cuales es necesario remitirse para remozarlos y adecuarlos a los tiempos actuales, siempre en un afán de encontrar soluciones que resulten aplicables.