El trabajo analiza la evolución y las perspectivas de la seguridad en América Latina y la incidencia que tuvo, y tiene los Estados Unidos en definir la agenda en función de sus intereses de seguridad nacional.
Estos cambios estuvieron signados por las percepciones del país de norte en relación a las transformaciones globales y regionales que hicieron que los tradicionales temas de la Guerra Fría fueran mutando hacia nuevos temas como la seguridad humana, la seguridad multidimensional, que engloban prácticamente todos áreas de la política interna y externa de los países latinoamericanos.
Dicha temática fue trasvasada por los atentados del 11 de septiembre de 2001, que provocó un giro radical en la temática de la seguridad global e impactó significativamente en la región.