El rock y su cultura representan un movimiento comunicacional de carácter musical que ha ofrecido la oportunidad de consolidar la juventud en oposición a determinados estilos de vida, formas constituidas de familia y cultura, entre otras cuestiones. El escritor francés Claude Chastagner lo sabe, lo reconoce y lo problematiza. De hecho, en su libro De la cultura rock, intenta comprender la vinculación entre el crecimiento del sistema capitalista y el desarrollo creciente del rock y su cultura en las últimas cinco décadas. Pretende, asimismo, una búsqueda de sentidos intensa y riesgosa, puesto que plantea una visión que simplifica la importancia de la cultura rock a partir de una postura de raigambre posmoderna (aunque intente separarse de esa idea en cada página). A través de estas cuestiones, Chastagner se ocupa de comprender la presencia del rock y busca centralizar y aprehender (o desmitificar) la voluntad del rock a lo largo de los años. No obstante, es posible encontrar en su discurso una intención de resignación y conformismo frente a la situación que apremia al rock de estos tiempos (y que, al parecer, siempre ha puesto en crisis al rock). El artículo intenta zanjar esa idea y profundizar aún más las tensiones con la Industria Cultural.