Un 15% de las víctimas que fallecen por ahogamiento no aspiraron agua, debido a un espasmo intenso e inmediato de la laringe, sino que murieron a causa de la asfixia. Las personas que aspiraron agua pueden padecer diversas lesiones pulmonares inmediatas y numerosas complicaciones tardías. Cuando estas alteraciones son significativas disminuye la cantidad de oxígeno en la sangre, lo que en un 20% de las víctimas es causa de una profunda lesión neurológica.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)