Bajo las condiciones vigentes en el sector eléctrico argentino, la calidad es un factor de mérito en la prestación del servicio. El incumplimiento de las expectativas de calidad genera bonificaciones en las tarifas de los usuarios. Ciertos atributos de la calidad, como la tasa tolerable de interrupciones y las tolerancias aceptadas en el nivel medio de la tensión, ya han sido introducidos en años anteriores.
Actualmente se regulan las perturbaciones (inicialmente “flicker” y armónicas) tolerables en la red y admisibles desde cargas perturbadoras.
Las reglas y procedimientos adoptados tienen sustento tanto en la experiencia internacional como en los resultados de una importante campaña piloto de mediciones realizadas sobre un área de concesión de 5 millones de usuarios. La información obtenida permitió correlacionar límites de emisión con niveles de referencia y, también, evaluar el impacto que la adopción de los niveles de referencia podrían tener sobre la prestación actual del servicio eléctrico.
En este artículo se explican los mecanismos adoptados para el control en la red, medios de evaluación y formas de penalización.