En este trabajo, se describirá la profundización de la regionalización a partir de un organismo como la Unión de Naciones Suramericanas, UNASUR, en base a la VI cumbre del año 2012, como una respuesta a la globalización. En este sentido analizaremos no solo la declaración final de la cumbre sino también otras declaraciones anexas a la misma que demuestran los intentos por parte de los Estados de constituirse como un contrapeso a la unipolaridad económica militar y política y una alternativa regional diferente a las anteriores. De todos modos, la UNASUR, presenta una continuidad con la Comunidad Sudamericana de Naciones cuyos objetivos si bien eran menos, también coincidían en ciertos aspectos fundamentales:
“La concertación y coordinación política y diplomática que afirme a la región como un factor diferenciado y dinámico en sus relaciones externas.
La profundización de la convergencia entre MERCOSUR, la Comunidad Andina y Chile a través del perfeccionamiento de la zona de libre comercio (…).
La integración física, energética y de comunicaciones en Sudamérica sobre la base de la profundización de las experiencias bilate4rales, regionales y subregionales existentes, con la consideración de mecanismos financieros innovadores y las propuestas sectoriales en curso que permitan una mejor realización de inversiones en infraestructura física para la región.
La armonización de políticas que promuevan el desarrollo rural y agroalimentario.
La transferencia de tecnología y de cooperación horizontal en todos los ámbitos de la ciencia, educación y cultura.
La creciente interacción entre las empresas y la sociedad civil en la dinámica de integración de este espacio sudamericano, teniendo en cuenta la responsabilidad social empresarial”