Estamos, como siempre en las democracias, en vísperas de las campañas políticas.
Las tarimas y los palcos comienzan a armarse, los medios cederán algunos segundos o centímetros de su tiempo y espacio y, como es usual, los cronistas de “política nacional” hablarán de actuación, espectáculo, armado de la escena, teatralización, escenario, creyendo que usan la figura retórica de la ironía. Aunque se engañan, sólo describen.
Y para desarrollar el tema tomaremos como ejemplo los análisis realizados en nuestra investigación sobre algunas de las campañas políticas de 2005.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)