Las radiaciones ionizantes pueden provocar lesiones en la molécula de ADN, ya sea en forma directa o a través de la generación de especies activas de oxígeno (EAO). Por tal motivo, dichas radiaciones son potencialmente capaces de ejercer presiones selectivas a nivel génico y se las considera agentes naturales de mutación.
El daño provocado por las EAO consiste, principalmente, en la producción de rupturas de cadena simple y sitios AP (apurínicos y apirimidínicos). Estas lesiones son corregidas en forma total o parcial por mecanismos celulares enzimáticos de reparación del ADN.
Se sabe que los niveles ambientales de las radiaciones ionizantes han sido variables a lo largo de la historia geológica de nuestro planeta. Por lo tanto, líneas filogenéticas originadas en diferentes períodos de la historia evolutiva habrían estado sometidas a distintos niveles de radiación. Si en determinados períodos se hubieran producido aumentos súbitos en los niveles de radiaciones ionizantes y no ionizantes - causados por fenómenos astronómicos, por ejemplola selección natural habría favorecido a aquellos organismos dotados de sistemas de reparación del ADN capaces de remover más eficazmente el daño producido en su material genético, ya que hubieran tenido mayor capacidad de supervivencia.
La mayoría de los insectos son varías veces más resistentes al efecto letal de las radiaciones ionizantes que la mayoría de los mamíferos. También se ha comprobado que, luego de la exposición a rayos X o gama, células delepidópteros presentan menor número de rupturas de cadena simple que células de roedores, y que reparan dichas lesiones en forma más rápida y eficaz. Dadas las posibles consecuencias deletéreas de lesiones no reparadas en el ADN, se ha postulado que la mayor radiorresistencia relativa de los insectos se debería a la alta eficiencia M proceso de reparación de su material genético.