En el número anterior de la revista destacamos algunos aspectos de la vida del joven Moreno, caracterizados por su temprana vocación por las Ciencias Naturales y su interés como coleccionista que lo llevaron a crear su propio museo. A los veinte años ya era Moreno un joven dedicado con seriedad a estos estudios y apasionado por los viajes de exploración. En diciembre de 1873, a los 21 años, realiza una corta exploración a la región del Río Negro, donde encuentra una serie de cráneos fósiles y objetos de piedra. Estudia los mismos y publica un trabajo que, a instancias de sus amigos, envía al célebre antropólogo francés, profesor Paul Broca. El mismo merece su aprobación y es publicado en la Revue d'Anthropologie, en París, en 1874. El profesor Broca elogia su trabajo y destaca la calidad del Museo Moreno.