Según Lafone Quevedo, “caylle” o “caijlle” es una voz caca na, la lengua perdida de las naciones Calchaquíes y Diaguitas. Con ella se denominaban las figuras o rostros humanos impresos en placas metálicas hechas en oro, plata, cobre o bronce. En los Andes de Argentina, Bolivia y Chile estos amuletos poseen una centenaria tradición cultural que se remonta, por lo menos, a los inicios de la era cristiana de los tiempos prehispánicos. Este disco, cuya imagen aparece en la tapa, es el más famoso que exista, el más referido en los textos arqueológicos del sur del Lago Titicaca y el más reproducido en las láminas de libros de prehistoria sobre cuestiones sudamericanas. Citado y descripto en textos publicados en una decena de idiomas. Un espécimen al que sólo los esmilodontes del escultor Víctor de Pol, los de la fachada del Museo de La Plata, le podrían disputar el carácter emblemático representativo de esta institución.