¿”Estar” en un centro comercial es una manera de habitar y vivir la ciudad?¿la diversidad de prácticas culturales y de apropiación territorial que las personas llevan a cabo en un centro comercial lo trastoca de lugar de intercambio mercantil a lugar afectivo? ¿la asistencia persistente a una plaza comercial puede desplegar el sentido de pertenencia? ¿se perciben diferencias en el “estar” del joven o del viejo, de la mujer o del hombre, del obrero o del profesionista y del “naco” o del “fresa”? En el presente trabajo, se trata de dar respuesta a éstos y otros interrogantes con la intención de revelar y analizar algunas de las prácticas culturales y de apropiación del espacio o territorio de las personas que concurren a Plaza Universidad, más allá de la lógica mercantil propia del mismo.