Se estudió la composición y distribución de las Selvas Pedemontanas y de las Selvas y Bosques Montanos, habitat de Cebus apella en el noroeste argentino, llegándose a la conclusión que las mismas son el producto de la historia biogeográfica de la región, asociado a los eventos árido húmedos del Pleistoceno. Esta afirmación se basa en el análisis del patrón de distribución geográfico de grupos de plantas y animales (árboles, helechos, aves, mamíferos, moluscos). Entre los rasgos característicos se pueden mencionar el elevado porcentaje de elementos que se presentan desde el límite con Bolivia hasta Tucumán, a pesar de una distribución latitudinal discontinua de estos tipos de vegetación y los numerosos elementos en común con las Selvas Paranaenses de Misiones, Norte de Corrientes y Este de Chaco y Formosa. Estas fluctuaciones pueden ser la causa en parte de la presencia de una sola especie de Primate en el N.O.A. (Cebus apella) y que su límite meridional se presenta hacia los 252 Lat.Sur, sin encontrarse en habitáis semejantes situados más hacia el Sur.
La estructura y composición de las Selvas Montañas varía sin embargo latitudinalmente pudiendo subdividirlas en tres sectores denominados Norte, Centro y Sur. Los dos primeros están habitados por Cebus apella. Esta variación latitudinal no se presenta en forma paulatina, sino que por el contrario la misma es abrupta, presentando características diferentes en cuanto a la disponibilidad de recursos, y a la interacción de Cebus apella con éstos.
El análisis de la estructura y funcionamiento de las Selvas Montanas del Parque Nacional El Rey, permitió atribuir la interacción Bromeliáceas-monos a la escasez y estacionalidad de la oferta de otros recursos utilizados por Cebus apella en otras zonas de su amplia área de distribución. Las Bromeliáceas se presentan como un recurso abundante y constante a lo largo del año, siendo más intensamente consumidas en Invierno y Primavera (época seca). Cebus apella utiliza al menos 6 especies de Bromeliáceas (Aechmea distichanta, Vriesis tucumanensis, Tillandsia maxima, T.pulchella, T.didissicha, T.ixioides), estimándose un consumo medio de la primer especie de 72 plantas/Ha. año que representa un 16% de la población adulta de la especie.