Todos los trabajos del profesor Alberini publicados en este volumen están guiados por una idea principal en torno a la cual las demás adquieren una importancia secundaria: la consolidación de un pensamiento nacional. Para ver en realidad el verdadero sentido de su prédica es necesario situarla históricamente en la lucha que entabla contra la cultura positivista de fines del siglo XIX y principios del XX. El país vivía una época de eufórica expansión (tanto económica como socialmente). Económicamente, la industrialización de los países europeos y la mejora de los medios de navegación, abre para los países no industrializados la posibilidad de transformarse en productores de materias primas de aquéllos, y socialmente, a fines de siglo se incrementa en forma pronunciada la colonización agrícola por medio de inmigrantes europeos.