El texto problematiza cómo desde los circuitos hegemónicos del mundo del arte se han cristalizado nociones de autoría y de obra vinculadas a una matriz liberal, atravesada por el mercado y por la idea de progreso individual. A esto se oponen las lógicas desde las que producen los artistas con actitud Copyleft. Lógicas vinculadas a las potencialidades que abren las tecnologías digitales e Internet y que llevan a establecer espacios curatoriales en la web.