Debido a las propiedades mecánicas de los materiales superiores con respecto a las cerámicas que le precedían, la introducción del zirconio (Y-TZP) en la clínica odontológica, han permitido la realización de una serie de dispositivos completamente cerámicos.
Algunos investigadores (Rasperini G, Maglione M, et al; 1998) reportan que el zirconio posee un módulo elástico similar al acero inoxidable, y un estrés de fractura a la flexión análogo al de las uniones del titanio. También fue demostrado que las propiedades químico-físicas de la superficie del mencionado material inhiben la adhesión de las bacterias al zirconio de la cavidad oral.
Otro factor que en la clínica odontológica aumentó el interés por el uso del zirconio en la fabricación de los implantes dentarios, son los casos de sensibilización a los iones metálicos que presenta con frecuencia la población. Hirvonene A, et-al; 2006, observó diferentes elevaciones superficiales sobre la superficie del zirconio; mientras que Piconi C, et-al 2011, asocia esta propiedad mecánica y física a la fijación de los implantes dentarios a los tejidos subyacentes a la pieza dentaria.
El objetivo de este trabajo es estudiar la condición superficial del zirconio, en relación a la biocompatibilidad.