Un entorno personalizado de aprendizaje (EPA) se centra en las preferencias del alumno, sus características, sus conocimientos previos, y su comportamiento, y le ofrece, a su vez, actividades alternativas para fortalecer contenidos en los que se muestra débil. Normalmente se utiliza como complemento a procesos de enseñanza-aprendizaje escolares, permitiendo motivar el avance de alumnos con conocimientos tanto por encima, como por debajo, del promedio.
Esta línea plantea la investigación y desarrollo de ontologías sobre el conocimiento necesario para responder a las preguntas formuladas durante el funcionamiento de un EPA en el contexto de la educación argentina.