En el embarazo tiene lugar una sobrecarga transitoria de volumen, con un aumento aproximado del 40% de la precarga (30) y concomitante aumento de la masa ventricular, considerados fisiológicos. En algún momento de la evolución en las pacientes hipertensas, estas variaciones estructurales, podrían dejar de ser fisiológicas o reversibles para tornarse patológicas o evolutivas. Del análisis de diferentes variables ecocardiográficas de estructura y función sistólica y diastólica, se trató de diferenciar aquellas embarazadas con modificaciones miocárdicas patológicas, que probablemente expresen un mayor riesgo evolutivo.