Este semestre estuvo signado por un simple formalismo y una mínima relación bilateral con EE.UU. Debido a la coyuntura que transita la Argentina de cara a las elecciones presidenciales.
En ese sentido, Estados Unidos se limita a preparar el escenario político y económico para retomar las relaciones diplomáticas, una vez que asuma el nuevo gobierno argentino a fines de este año.