El atentado del 11 de septiembre de 2001 marcó un punto de inflexión en el posicionamiento global frente al fenómeno del terrorismo islámico. A partir de este acontecimiento, Estados Unidos inició una política de “guerra total” contra Al Quaeda e invadió Afganistán e Irak, derrocando a ambos gobiernos con el objeto de instaurar sistemas democráticos en la región. Esta redefinición estratégica de la Potencia del Norte, tuvo un impacto directo en el posicionamiento de los distintos actores del sistema internacional. De esta manera, la lucha contra el terrorismo se convirtió en uno de los principales temas de la agenda de EEUU que condicionó sus relaciones con el resto del mundo en general y con Latinoamérica y Argentina en particular.
Frente a esta problemática, en el presente trabajo, el cual representa un primer avance sobre el tema, nos proponemos realizar un análisis comparado de los discursos y documentos de los Poderes Ejecutivos de EEUU y Argentina frente al Terrorismo, entendiendo el ‘11 s’ como un parteaguas que permite señalar rupturas y continuidades así como la construcción del otro como enemigo y la configuración de un nuevo sistema de alianzas. De forma inherente, realizaremos un abordaje de los imaginarios que subyacen en las distintas construcciones identitarias.