Luego de un año difícil para Brasil una mayoría en el Congreso consiguió destituir, mediante un proceso de “impeachment” o también conocido como juicio político, a una presidente popularmente electa por más de 54,5 millones de votos, lo cual produjo diferentes reacciones no solo entre distintos sectores de la sociedad, especialmente entre académicos, sino también en los distintos países y organismos latinoamericanos.
Una cuestión que abrió debates, polémicas, repercusiones y generó diversos interrogantes.
El impeachment junto a la corrupción en el seno del poder político brasileño provocaron diversas reacciones en la sociedad y las repercusiones sociales de ello se vieron reflejadas a través de las urnas en las elecciones Municipales del 2 de octubre.