La relación existente entre el nivel socioeconómico cultural y la prevalencia de enfermedades de transmisión pre y perinatal, refleja la necesidad del control de la gestante desde las primeras etapas del embarazo. La detección temprana de la enfermedad de Chagas, Sífilis e Infección por el Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH), previene el impacto a corto y largo plazo de estas patologías en los niños.