Entre el 8 y el 10 de diciembre de 1977 doce integrantes de un grupo más amplio de personas que se reunían con frecuencia en la Iglesia de la Santa Cruz (Ciudad de Buenos Aires) para organizar la búsqueda de los desaparecidos, fueron secuestrados y asesinados por la Marina. Entre ellos se encontraban algunas Madres de Plaza de Mayo, dos religiosas francesas, otros familiares de desaparecidos y varios militantes políticos. El propósito de este artículo es indagar en los significados que se elaboran desde la Iglesia de la Santa Cruz en torno a estos actores y acontecimientos relacionados con la última dictadura militar, a la vez que explorar los modos en que las prácticas y discursos religiosos se articulan con la construcción y transmisión de las memorias sobre el terrorismo de Estado. Sobre la base de observaciones realizadas en el lugar analizo las conmemoraciones que se realizan los 8 de diciembre para recordar y homenajear al llamado “grupo de los 12 de la Santa Cruz”, dando cuenta de los elementos, tanto narrativos como no discursivos, que contribuyen a construir un marco de interpretación sobre los hechos que se conmemoran. Analizo de este modo las conexiones de sentido que, a través de categorías como la “pasión”, se producen entre actores, figuras y escenas del campo político y del campo religioso.