A partir del avance de las telecomunicaciones, la formación del Profesorado en TIC cobra relevancia, encontrándose en la actualidad apuntando a su incorporación manera significativa en las prácticas del aula. Con los nuevos dispositivos, los saberes se deslocalizan y cambian las relaciones con el saber, con el docente, con la escuela, pero también entre pares. A su vez, instantaneidad e inmediatez rompen con un tiempo secuencial. Frente a este escenario, los especialistas proponen nuevas formas de socialidad que exceden la organización de la clase escolar. Aparecen así nociones como “aula aumentada” (Sagol, 2012), “aprendizaje aumentado” (Reig, 2012), “aprendizaje ubicuo” (Burbules, 2012) y hasta los más recientes “Entornos personales de aprendizaje” (Castañeda y Adell, 2013), que son sobre los que reflexiona este trabajo.