Si analizamos las producciones interactivas concebidas para operar con múltiples usuarios y las comparamos con experiencias orientadas a un único individuo, notaremos que existen grandes diferencias en sus desarrollos discursivos y en el papel desempeñado por el usuario dentro de los mismos, es por este motivo que en el presente texto se realiza un análisis en torno a las a las disimilitudes existente entre dichas producciones con el objetivo de poder reconocer una serie de puntos que permitan entender sus principales características, así como las dinámicas internas generadas entre los participantes y las obras.
En este sentido la relevancia de la investigación radica en el mejor entendimiento de las variables que intervienen en una experiencia interactiva y en la identificación de tres elementos comunes a muchas experiencias multiusuario: La multiplicidad de canales comunicativos, la imprevisibilidad en el desarrollo de las producciones y el planteamiento de la obra como un universo de posibilidades abiertas a la intervención constante. Con el fin último de comprender los riesgos y ventajas que entrañan estos componentes en el desarrollo de las experiencias interactivas, y que posibiliten arribar a la conclusión de que si bien los sistemas multiusuario otorgan un amplio abanico de posibilidades expresivas, también entrañan el riesgo de resignificar una obra en términos inesperados.